Recopilación de: Alejandro Glade R.
Lugar: Región de Tarapacá.
Cerca del
estanque había un sembrado; pero el pasto desaparecía continuamente, sin
poderse averiguar quién era el visitante nocturno que se tomaba el empeño de
cortarlo. El propietario decidió quedarse una noche en vela para sorprender al
ladrón.
A eso de las 10
divisó un bulto, preparó su revólver y le dirigió la, palabra sin obtener
respuesta; por el contrario, avanzaba directamente hacia él. Por segunda vez le
habló con el mismo resultado, por lo que disparó su arma al aire. Notó que caía
el intruso pesadamente al suelo, y se asustó ante el temor de haber muerto a un
hombre, por lo que arrancó precipitadamente.
Al otro día no
encontró huellas de que alguien hubiese estado en el lugar, salvo las señales
de sus propios pasos.
Recopilación por: Alejandro Glade R.