jueves, 16 de enero de 2020

El rey Tanga-Roa y el gigante Teteko.

Lugar: Rapa Nui - Easter Island.



Tanga-Roa se llamaba el personaje y vivía en una isla lejana soñando con el estado de atraso de los isleños en Rapa Nui.  Resolvió atravesar a nado a llegar a la isla.

Arahi-Ariki, Tanga-Roa, Rey soy, y Tanga-Roa me llamo, les dijo al poner el pie en tierra. Pero los isleños Rapa Nui, indignados ante su desordenada y atrevida ambición, le contestaron al unísono:

A pakia, reo ke (mentira, eres una foca). 

Y sin mayor ceremonia ni proceso lo tomaron por sorpresa lo degollaron y lo comenzaron a asar, igual que a un lobo de mar, en un hoyo con piedras calientes, a la usanza de la isla. Grande fue la sorpresa de los Rapa Nui al ver, al día siguiente, que después de tantas horas de cocción, el cuerpo de Tanga-Roa seguía crudo.

Comenzaron entonces a temer que éste hubiera dicho la verdad y fuese realmente un rey. Para librarse del cuerpo del delito les enviaron los restos de Tanga-Roa a los habitantes de otra pequeña isla, y éstos también intentaron cocerlo con el mismo infructuoso resultado. Era que el cuerpo de Tanga-Roa era inasable?, pero desgraciadamente no era incorruptible y como empezaba, a descomponerse, tuvieron que arrojarlo a mar. 

A poco de estos acontecimientos, llegó un gigante, Teteko, hermano de Tanga- Roa, tan enorme que sólo se le veían las piernas. El cuerpo y la cabeza se perdían en las nubes. Dio tres pasos, y estos bastaron para recorrer toda la isla, preguntando por su hermano, y como nadie le contestara siguió su camino.



Recopilación de: Alejandro Glade R.