martes, 22 de noviembre de 2016

Los moai caminaron!



Miru A'Hotu y Tani Teako A'Hotu, de la tribu de los miru, habían aprendido de Have Hake cómo hacer los "moai". Muerto Have Hake se mantuvieron cuidadosos de no revelar el secreto. De tal modo que se constituyeron en los maestros de la cantera de Rano-raraku.

El volcán abrió sus entrañas, y bajo el golpe febril de los escultores, fue entregando "moai" cada vez más gigantescos que, caminando solos, iban a ubicarse en distintos lugares de la isla. Muchos "moai" salieron de ahí.

Al compás de los cantos, de ritmos autóctonos, iban dibujando rostros sobre la roca grisácea, mientras los maestros Miru A'Hotu y Tani Teako A'Hotu dirigían a los escultores.

Primero la cabeza, luego el cuerpo, el fino tallado de las orejas y de las manos, hasta que por fin el último golpe rompía la unión de la montaña, los moai, con sus órbitas secas, la nuca aplastada, con una mueca desdeñosa en sus finos labios salientes y las manos cruzando la barriga, bajaban del volcán caminando, iban hacia los "ahu".


Una tarde, mientras servían a los maestros la comida, uno de los ayudantes preguntó:

-Miru A'Hotu, ¿cómo se forma la cabeza de las estatuas?

Este sonrió y dijo:

-Es muy fácil; mira la tuya, entonces sabrás cómo la formamos.

Luego, otro preguntó:

-Tani Teako A'Hotu, ¿cómo se forma el cuerpo de los "moai"?

Y la respuesta fue la misma.

Ute-uka y Manu-ataki, que habían formulado las preguntas, regresaron preocupados a sus "hare-paena". No lograban comprender las respuestas. Como la hora era avanzada y la brisa soplaba tibia, decidieron darse un baño. Una vez en el agua, se miraron sus cuerpos, sus sexos y sus cabezas. Vieron que tenían una notable semejanza como los "moai". A partir de ese momento comprendieron que para hacer buenos "moai" deberían tomar como modelo sus propias figuras.

Ute-uka y Manu-ataki probaron esculpir una estatua, pero ella resultó muy fea. Los isleños al verla estallaron en risas y se burlaron de los escultores principiantes. Volvieron a esculpir otra, que resultó mejor, pero aún con defectos, hasta que un tercer "moai", que llamaron Have, fue perfecto, como la obra de sus maestros.Llenos de alegría, Ute-uka y Manu-ataki ordenaron en voz alta: "¡Levántate y camina!". Y la estatua se incorporó y se fue caminando hacia Hotu-iti.Saltaron de regocijo: conocían el gran secreto, y para evitar competencias no buscaron ayudantes, sino que tomaron a una vieja para que los atendiera. Era una mujer vieja, fea, pero ignoraban que ella era bruja.

En una ocasión que los escultores salieron a pescar, y estuvieron todo el día en la faena, no cogieron ni un solo pez. Al anochecer, Ute-uka, desganado por el caso, lanzó al agua en un último intento la red. Al recogerla la sintió pesada; llamó a Matu-ataki, y con asombro vieron que en ella venía la fabulosa tortuga Urarape-nui, muy buscada porque existía la creencia de que al comerla se adquiría inteligencia extraordinaria, larga vida y mucha fuerza. Rápidamente la mataron y se la adjudicaron en partes iguales. De regreso, en la playa, prepararon un sabroso "umu", que se comieron sin dejar nada.
Al día siguiente, al amanecer, llegó la mujer que los atendía. Al ver la coraza de la tortuga, ansiosamente buscó un trozo de carne, sin encontrar nada. Dominada por la cólera, preguntó:

-¿DÓNDE ESTÁ MI PARTE?-No hay nada para ti, le respondieron Ute-uka y Manu-ataki.

La vieja se llenó de rencor, y sin decir nada se alejó furiosa a refugiarse en una cueva. Al atardecer, mientras el viento movía ondulante al pastizal, vio venir, desde las faldas del volcán Rano-raraku, a algunos "moai". Indignada les salió al encuentro, y con voz terrible les gritó:

-¡DETÉNGANSE, NO CAMINEN MÁS!

Y los "moai" quedaron paralizados. Entonces la bruja, volviéndose hacia los "ahu", ordenó:

-¡CAIGANSE DE SUS BASES!

Y los colosos, que permanecían arrogantes, inmóviles sobre las plataformas, cayeron acompañados de un estruendo ensordecedor. La vieja, asustada de lo que había pasado, quiso huir, pero en su intento fue aplastada por un enorme "moai". De los hombres no se supo nunca más.




Recopilación de: Alejandro Glade R.






lunes, 7 de noviembre de 2016

Los Eclipses y las embarazadas.



Los eclipses  de Sol y de Luna  están llenos  de mitos y leyendas, y  las embarazadas son las más perjudicadas con estos eventos. Porque ante las dudas no se exponen.


En todas las culturas y a través de miles de años, en todos los tiempos, ha existido la superstición ante los eclipses al ser un fenómeno impresionante que rompe la monotonía del cielo. En el pasado a estos fenómenos se les relacionaba con pestes, guerras, asesinatos y caídas de reyes.

A pesar de que científicamente no se ha comprobado ningún efecto negativo contra las embarazadas, contra el feto o contra las personas en general, con el tiempo se han ido acumulando una serie de mitos y leyendas sobre el tema.  El eclipse más común es el eclipse de Luna, y desde tiempos remotos los aztecas por ejemplo, consideraban que causaban daños en las guaguas o bebes.

A continuación les entrego muchas de estas creencias ya arraigadas en nuestra sociedad.

-Se cree que los eclipses absorben al feto y por esta razón sería que nacen niños con deformaciones como paladar hendido o labio leporino.

-Se dice también y se ha llegado a considerar que los eclipses de sol causan ceguera o trastornos de la vista en los pequeños, pues al exponerse la madre a este tipo de radiación puede afectar la gestación y causar problemas en la vista.

-Se dice que los eclipses  favorecen el adelanto de los nacimientos de los niños, es decir, que se anticipan a los tiempos estipulados para su nacimiento. Por eso sería que cada vez que hay eclipse las maternidades se llenan de trabajo.

-Si un niño nace debido a un eclipse, ese tendrá dotes especiales y será más inteligente que el resto.
-La Luna se pondría furiosa durante los eclipses y trae situaciones extrañas, como mal humor o situaciones que alteran la estabilidad de las cosas o de algo.

-Se dice que cuando una mujer embarazada mira fijamente el eclipse, su guagua o bebé tendrá muchos lunares o manchas en la piel.

-Algunos creen que si el embrión ya está formado el día del eclipse será un varón, mientras que de lo contrario será una niña.

Lo cierto es que existen testimonios de mujeres que salieron a ver el eclipse y tuvieron al hijo o hija con problemas físicos de algún tipo…

Y para las personas que creen y quieren evitar estos “males” producidos por los eclipses, se recomienda lo siguiente:

* Usar ropa interior y exterior de color rojo, con franjas en el mismo tono.
* Prender alfileres y alfileres de gancho, seguros en la ropa.
* Llevar un puñado de llaves en cada bolsillo.
* Tocar un silbato o un tambor y hacer mucho ruido para “espantar” al eclipse.
* Permanecer en un lugar de la casa donde no llegue la luz del sol y de la luna durante el eclipse.
* Salir al patio de la casa con un espejo a la hora exacta del eclipse y reflejar la luz del sol ( o de la luna, según sea) para que el eclipse “se perjudique y se coma a sí mismo”.
* Durante el eclipse debes poner unas tijeras de acero bajo la almohada o detrás de la puerta en forma de cruz.




Recopilado por:  Alejandro Glade R.


sábado, 8 de octubre de 2016

La leyenda de la Ñusta y la Tirana.

Lugar: Norte de Chile.

Coordenadas: 20°20'9.77"S 69°39'23.11"W
 (plaza de La Tirana,
donde está la estatua de la Ñusta)
20°20'26.08"S 69°39'3.50"W
 (lugar de la Iglesia antigua,
 donde se encontró la cruz)
Esta leyenda proviene del  tiempo en que los españoles conquistaron el Perú, y se trata de una bellísima princesa, de nombre Ñusta Huillac, que acostumbraba ejecutar a los extranjeros que llegaban a sus tierras, acto del que hiso una costumbre, y que recibió el sobrenombre de “La Tirana del Tamarugal”.

Diego de Almagro, conquistador español, durante el año 1535, viajaba con sus ejércitos y comitiva a Chile, desde el Cuzco, después de haber capturado esclavos, para los trabajos de los españoles apresados en la región del Cuzco. Entre todos estos rehenes se encontraba la princesa Ñusta, última descendiente de un sacerdote que rendía culto al sol.

Durante esta travesía, la joven logra escapar junto con algunos de los “Wilcas” fieles y valientes guerreros suyos, en su penoso escape llegan a un lugar denominado “La Pampa del Tamarugal”, un paraje diferente al terreno por donde habían venido,  este estaba lleno de vegetación y contenía en sus ríos abundantes aguas. Lo encontró un lugar maravilloso y ahí establecieron su refugio.

Fue en ese acontecimiento que “La Ñusta” no tenía compasión por ningún extranjero que llegara a parar a La Pampa del Tamarugal, pues a todos les hacía asesinar de la peor forma. Se supo que Incluso llegó al extremo de matar a indígenas que se convirtieron al cristianismo, religión que comenzaba a ser propagada por parte de los conquistadores españoles, reemplazando a sus propios ídolos y creencias.



Pasó el tiempo y llegó un apuesto hombre al Tamarugal llamado Vasco de Almeida, con el fin de trabajar en unas minas del lugar, con el fin de encontrar fortuna. En una de sus andanzas La Ñusta lo vio y quedó perdidamente enamorada de él, por lo que hizo todo lo que estuvo a su alcance para evitarle la muerte.

Al ver que su amor era correspondido por Vasco de Almeida, la princesa accedió a convertirse en cristiana solo para poder estar junto a él, por lo que se celebraron todos los ritos cristianos y fue bautizada.

Actual iglesia de la Tirana

La Tirana sucumbe ante el amor. Cuando el resto de su comunidad, se enteró de esta situación, los asesinaron disparándoles a ambos cientos de flechas.

Al momento de la muerte le instalaron una cruz de madera  en el lugar del sepulcro de La Ñusta, y el año 1540 el misionero Antonio Rendón, de la real orden mercedaria, construyó una Ermita, porque decían que esta doncella del Imperio Inca estaba emparentada con la virgen y, además de considerar un milagro que le sucedió: Un día vio un arco iris y siguió su comienzo hasta un bosque de tamarugos. Ahí, con infinita sorpresa, encontró una cruz cristiana en uno de los claros de este bosque.

 El santo cura vio en ello una especie de indicio del cielo, una llamada de recuerdo a la Princesa

Tirana del Tamarugal. Por eso edificó una Ermita, que con el correr del tiempo, se convirtió en Iglesia, y llegó a su alero Nuestra Señora del Carmen de La Tirana, pensando en el escapulario Carmelita que llevaba Vasco de Almeida.

Dicha iglesia se convirtió desde los primeros años de su consagración en asidua romería de los naturales de los pueblos y sierras inmediatas, en cuyas venas corre sangre coya. Fue la que fluía por las venas de la bella princesa, “Ñusta Huillac”, que legó su nombre y su historia de fe y amor e impulsó el culto de  “La Tirana”.

La Tirana es una localidad ubicada en la comuna de Pozo Almonte, en la I Región de Tarapacá, Chile. El pueblo de La Tirana se ubica en un oasis situado en el corazón de la Pampa del Tamarugal, distante a 72 kilómetros de Iquique.

A la tradición oral sobre el origen del Santuario se unen los datos históricos que se conservan. Este pueblo de origen minero, leñadores, arrieros y peones, dependía de la parroquia del oasis de Pica a unos cuarenta kilómetros al Sur Este.

Ruinas - Primer Templo antiguo: Del primer templo, destruido por un terremoto en 1868, quedan sólo sus ruinas. Actualmente junto a ella se ha construido uno nuevo siguiendo las líneas de los templos andinos.

El segundo Templo: Se quemó en 1880.

El actual Templo: Se comienza a construir con la ayuda de los mineros de toda la pampa. La guerra del Pacífico interrumpe las faenas, pudiéndose inaugurar sólo en 1886. Es construido sobre una base de madera forrado con planchas de zinc. La reconstrucción del templo permitió la remodelación del pueblo en torno a él.


La data de la presencia de los bailes religiosos en La Tirana es oscura. Hay algunos antecedentes que muestran que antes de 1879, inicio de la guerra del Pacífico, existían grupos de bailes de origen aimara que celebraban la transfiguración el 6 de Agosto. Con la presencia de la soberanía chilena, se comenzará a celebrar el día 16 de Julio la fiesta de Nuestra Señora del Carmen, patrona de Chile.



“La Ñusta al momento de su muerte dijo: muero contenta, muero feliz, segura como estoy, como creyente en Jesucristo, de que mi alma inmortal ascenderá a la Gloria y llegaré al trono de Dios, junto al cual estará mi amado, con quien estaré toda una eternidad. Sólo les pido que después de mi muerte, coloquen una cruz en mi sepultura, que estará al lado de la de mi amado”.





Recopilación de: Alejandro Glade R.






La Ciudad de los Césares.


La actual leyenda de la Ciudad de los Césares está basada principalmente en la fusión de cuatro historias independientes, la primera de todas y la que refiere a su existencia, aparece con la expedición realizada por el capitán Francisco César en 1528, que antiguamente había participado  en el descubrimiento del Río de la Plata junto a  Sebastián Cabot. La Ciudad de los Césares, también conocida indistintamente como la Ciudad de la Patagonia, también como la ciudad errante, Trapalanda o Trapananda , Lin Lin o Elelín , es la misma ciudad mítica de algún punto en América del Sur. Se cree que fue este lugar está situado en algún lugar de la Patagonia, en un valle escondido de la cordillera de los Andes entre Chile y Argentina. 

A pesar de haber buscado durante la colonización de América del Sur, no hay ninguna evidencia que demuestre que alguna vez existió, aunque hay informes que circularon durante doscientos años.  En 1766 un jesuita, el Padre José García Alsue, exploró toda el área en una planeada expedición, desde el río Palena al Sur, equipado con cinco piraguas, treinta indígenas y sólo cinco españoles, recorrió los canales Jacaf y Puyuhuapi, también la zona que ahora forma parte del  parque Nacional Queulat  en la Región de Aysén, Chile, dejó muy buenos antecedentes de toda la expedición, buscando sin éxito la famosa Ciudad de los Césares.

La ciudad es descrita como próspera y rica, llena de oro, plata y diamantes. Existe al menos una descripción que dice que se encuentra en medio de dos montañas, en algún lugar de las montañas de los Andes, en la que una montaña es de Oro y la otra es de diamantes.  A veces se describe como una ciudad encantada que aparece en determinados momentos y en algunas situaciones, de tal manera que aquellos que llegaran a ella por casualidad o en alguno de sus viajes, olvidarían rápidamente el encuentro; o también si los cazadores que van buscando en las montañas la fortuna y el tesoro. 

Sus supuestos fundadores, los que fundaron por primera vez esta supuesta ciudad, fueron náufragos en el estrecho de Magallanes, y sobrevivientes de la expedición del obispo de Plasensia, Gutierre de Vargas Carvajal, en 1540, español, estas historias y leyendas de náufragos empezaron a recorrer por gran parte del sur de Chile, Buenos Aires y Tucumán, se comenta que vieron a los gigantes de la Patagonia y sobrevivientes del  Imperio Inca, si relacionamos estos hechos, nos llevan a relacionarnos con leyendas  que se derivan de historias contadas a los marineros por aborígenes que describieron perfectamente el  Imperio del Perú.

También hay otra historia que dice que fue una ciudad apartada del imperio inca, donde vivían Mitimaes incas, que eran incas  desterrados, grupos de familias separadas de sus comunidades por el Imperio y trasladados a pueblos lejanos.




Recopilación por: Alejandro Glade R.






viernes, 7 de octubre de 2016

Trentren Vilu y Caicai Vilu.


Lucha entre Trentren Vilu y Caicai Vilu.

Lugar: Archipiélago de Chiloe.


La leyenda de Trentren Vilu y Caicai Vilu es una leyenda sobre geografía y el origen del archipiélago de  Chiloe, y todas las montañas del sur de Chile, las que se originaron por una feroz feroz batalla entre dos serpientes míticas, Trentren Vilu (Trentren = "relacionado con el tierra ", Vilu =" serpiente ") y Caicai Vilu (Caicai =" relacionados con el agua ", Vilu =" mitad serpiente y  mitad pez ").

La Leyenda dice así:

Trentren Vilu es el dios de la Tierra, tiene poderes para dominar la tierra, y sus volcanes y es un espíritu generoso y protector de la vida en  toda la tierra. Caicai Vilu es el dios del agua y de todo lo que habita en ella, además de gobernar  los mares.

Cuenta la historia que hace miles de años, lo que hoy es la provincia de Chiloé fue una vez una masa de tierra apegada al continente y limitante  con Chile.  Un día, una monstruosa serpiente llamada Caicai apareció e inundó las tierras bajas, valles y montañas, sumergiendo toda la flora y la fauna. Sin demora, Trentren Vilu apareció para reparar lo acontecido y se inició una confrontación con su enemigo, elevando la tierra y protegiendola de posibles desastres. La batalla fue encarnizada y duró mucho. Trentren Vilu alcanzó la victoria costosamente, ganó la batalla, pero fue incapaz de restaurar los terrenos a su estado original, dejando dejando  los terrenos desmembrados tal como se conocen el día de hoy.

Cuando terminan las hostilidades, Caicai Vilu deja como representante y propietario de todos los mares, al rey Millalobo, que fue concebido durante una invasión cuando una mujer hermosa se enamoró de un león marino.

Según los mapuches, estas dos serpientes serían originalmente los hijos de los pillanes más poderosos, que como castigo habrían sido convertidos en estos seres. Así que el hijo de Peripillán fue convertido en una inmensa serpiente que sería Caicai y el hijo de Antu convertido en una inmensa serpiente que sería Trentren. Ambas serpientes serían adversarias, así como fueron adversarios Antu y Peripillán. Caicai habría sido mandada a vivir en el mar para ayudar a cuidarlo junto a los Ngen-ko, y Trentren habría sido mandada a vivir en la tierra para ayudar a cuidar junto a los demás Ngen a la tierra, y para ayudar al ser humano. Siendo así como estas dos culebras son usadas como un instrumento a través del cual también se cumple la voluntad de los antiguos espíritus mapuche.

Esta es una leyenda que describe la nueva región formada por el agua y la tierra y da la vida que es el estilo que tiene Chiloé.


miércoles, 3 de agosto de 2016

Leyenda de Mocha Dick

Recopilación de: Alejandro Glade R.

























Lugar: Isla Mocha, en la costa de la provincia de Arauco, Chile.

Mocha Dick fue un notable cachalote macho que vivió en el océano Pacífico a principios del siglo XIX, encontrado usualmente surcando las aguas por los alrededores de la isla Mocha, al sudoeste de Chile. A diferencia de muchos otros cachalotes, Mocha Dick era un cachalote de color blanco por ser un ejemplar albino, que participó en más de 100 escaramuzas con balleneros antes de que fuera muerto.

Se decía que era muy grande y fuerte con veinte cuatro metros de largo, y que hundía botes de gran envergadura con su aleta caudal.

Esta historia llega a oídos del escritor estadounidense Hernan Melville cuando se embarca en uno de los varios barcos balleneros de ese tiempo y tiene aventuras recorriendo las islas del pacifico, y pudo haber sido esa la ocasión en que Melville conoce la historia de Mocha Dick y el posible hundimiento del ballenero Essex, historias de balleneros más publicaciones sobre las experiencias vividas por los sobrevivientes, fueron al parecer,  la inspiración para su novela Moby Dick publicada en 1851.

 Al hundirse el ballenero Essex se comienza a crear la parte mitológica y de leyenda,  hasta convertirse en mitología universal, porque los sobrevivientes llegados al puerto de Valparaíso, comenzaron a contar historias las que también fueron anotadas por el explorador Jeremiah N. Reynolds,  y que fueron publicadas en la edición del The Knickerbocker para mayo de 1839.

La novela de Melville,  Moby Dick, publicada en 1851, cuenta sobre un viaje del capitán Ahab, en el barco ballenero Pequod, en su afán obsesivo por cazar al gran cachalote blanco, llevándolo a su propia destrucción.






Escrito por: Alejandro Glade R.






Leyenda de Uoke el desvastador


Lugar: Rapa Nui, Isla de Pascua

Uoke es el dios que según la leyenda, sería el causante de una gran devastación en la isla, y quedó como es la Isla de Pascua en la actualidad.


La leyenda dice que la tierra de Rapa Nui hace muchos años atrás era muy grande y extensa, tan grande como las tierras de Hiva. En aquellos tiempos el antiguo dios Uoke, disponía de un gran poder y le gustaba jugar con una especie de palanca, con la que hundía y levantaba  los continentes y las
tierras, y con ello también la antigua tierra donde estaba el gran territorio de Rapa Nui.


Un día cuando Uoke estaba jugando a levantar y bajar la tierra de Hiva, cuando llegó a Puku Puhi-puhi, se le quebró la palanca; y con ello se termina el juego de la tierra, quedando gran parte de la antigua tierra de Rapa Nui hundida y sumergida, ya que estaba ubicada en la superficie de la tierra que en ese momento se encontraba abajo del mar. Hoy en día conocemos sólo la parte que quedó afuera del agua y es la razón de que quedara convertida en una isla tan pequeña, de ella sólo quedaron en la superficie las cimas de sus montañas junto con lo que conocemos hoy en día.




Recopilación por: Alejandro Glade R.




lunes, 1 de agosto de 2016

El invunche o inbunche.


Lugar: Archipiélago de Chiloé


Es un mito que es muy terrorífico y aterrador por varias razones. 

En primer lugar, se centra en un niño. 

Un hijo primogénito que fue vendido por sus padres antes de su noveno día de nacimiento a un miembro de la comunidad de brujos, esta comunidad correspondía a un grupo especial de brujos. 

En segundo lugar, el bebé tiene la capacidad de deformarse y dislocar sus miembros. Dos meses más tarde, se le bifurcó su lengua. Con el tiempo, los brujos lo sometieron a tales brujerías que este niño era capaz de girar la cabeza en 180 grados. 

Su última transformación consistió en cortar bajo el hombro derecho haciendo una incisión, insertando y cosiendo su mano derecha dentro de la herida. Cuando sanaron sus heridas, el Imbunche estaba completo y listo para asumir su papel como guardián de la cueva de los brujos y consultor de los brujos de Chiloé. 

Su aspecto final era de un ser totalmente deforme,  tiene su cabeza doblada hacia atrás;  además, tiene torcidos los brazos, y codos salidos, dedos deformes, nariz, boca y orejas dobladas. Anda en una sola pierna o en tres pies como también camina en una pierna y las manos, pues la otra pierna está pegada por detrás al cuello o a la nuca. El invunche no habla, y sólo emite sonidos guturales, ásperos y desagradables.

Este mito es uno de los pocos que fuera llevado fuera del país de origen para ser llevado a un libro por el escritor británico Alan Moore.  



Recopilación por: Alejandro Glade R.






jueves, 14 de julio de 2016

El Coñipoñi

Lugar: Archipiélago de Chiloé.



El Coñipoñi (del mapudungun coñi, “parto” y poñi "papa"), es una criatura mitológica perteneciente a la mitología chilota; la cual cumpliría la función de cuidar niños.

El Coñipoñi es descrito como un pequeño gusano que se caracteriza por ser de un color plomizo.

"COÑIPOÑI"
Según la leyenda, el Coñipoñi habitaría en los tallos de las plantas de papas que se cultivan en Chiloé.

Las tradiciones, dicen que las Mujeres chilotas, que eran madres de niños recién nacidos, se alegraban cuando encontraban uno de esto gusanos; ya que eran usados como niñeras. Para ello, se debía llevar al Coñipoñi a la casa de la madre, colocándolo bajo la almohada del niño recién nacido, y siempre recordar alimentarlo con unas cuantas gotas de leche proveniente de la madre. De esta forma se dice que la madre conseguiría que este pequeño gusano hiciera que su hijo estuviera feliz, tranquilo y sin llorar.

Cuando el pueblo chilote no está dedicado a las faenas  del mar, su actividad se desenvuelve en labores agrícolas, especialmente, el cultivo de la papa.

Este tubérculo originario de Chiloé, hoy su cultivo se ha extendido a gran parte de nuestro planeta, constituyendo uno de los alimentos básicos de la humanidad. Además de ello, los usos que de él pueden hacerse son tantos, que alguien, con gran propiedad, debería ser al revés, y dijo que le agradaría saber mejor; para qué no son útiles las papas.

La siembra de la papa, y sus tratamientos ulteriores, cuentan, en el archipiélago, con la colaboración de todas las familias, y participan en familia de acuerdo a sus posibilidades. El instrumento elegido para este trabajo es el “gualato”, semejante al azadón, hoy hecho de fierro, los antiguos eran de duras maderas como la luma. En el fondo la papa es la que proporciona al animalito que se preocupa del cuidado a una tierna criatura, la papa le proporciona, a su  delicado niño, el incomparable “Coñipoñi”.

Entre los tallos tiernos de las matas de los papales y protegida por las hojas, se suele encontrar ( y no es mito), un pequeño y hermoso gusanillo color plomizo; gran parte de su cuerpo está cubierto por un gracioso y blanquecino envoltorio, a modo de capa, que puede ser desprendido fácilmente, pero no es su totalidad porque éste está prendido en el extremo opuesto a su pequeña cabeza.

Conseguir un Coñipoñi, es una gran suerte, manifestaba una señora que tuvo dieciséis hijos y que contó con esta maravillosa niñera. Es incomparable, recalcaba, para calmar a los niños inquietos y llorones: basta dejarla bajo la pequeña almohada de la cuna, para que su virtud se deje sentir, tranquilizando al niño llorón, en forma inmediata.

El Coñipoñi, es muy solicitado por toda madre que trabaje fuera del hogar, ya que gracias a su auxilio, puede realizar sus faenas, totalmente despreocupada en su inquietud maternal, porque sabe que su criatura estará muy tranquila y acompañada,  bajo los mágicos cuidados de este minúsculo y valioso gusanito, hecho para las madres, por los espíritus protectores de los papales, con la intención de facilitar el trabajo, tendientes al mejor desarrollo y a la multiplicación del tubérculo.

Este animalito es un amigo fiel y tiene además la notable cualidad de ser muy poco exigente con sus amos, sólo pide compartir una pequeña cantidad de la leche materna, con la que se alimenta el bebé. Cuando el niño puede andar y procurarse con la distracción de algunos objetos, se considera que la presencia de la Coñipoñi, es innecesaria y por tal razón, se le  lleva con maternal cuidado, al papal más cercano y se la deja en libertad, entre las melgas.


Recopilación de: Alejandro Glade R.




La Añañuca y el desierto florido.

Lugar: Norte Grande de Chile.

Añañuca amarilla,  norte grande.

Durante la conquista y dominio español en el reinado de Chile, existió una bella mujer llamada Añañuca, esta vivía en Monte Patria, en un caserío cerca del río Limarí.

 Añañuca era muy hermosa y atrajo la admiración de todos los jóvenes en su pueblo y alrededores, pero nunca,  ninguno de ellos fue capaz de conquistarla y de ganarse su amor.

Un día de aquellos como tantos, un minero guapo y  misterioso llegó de paso a su pueblo, buscando una mítica vena de oro. Cuando vio a Añañuca, él se enamoró de ella inmediatamente, y ella le correspondió su amor, olvidándose el minero de su oro y decidieron vivir juntos por bastante tiempo, eran felices en el pueblo. Pero una noche, el minero tuvo un sueño inquietante, en el que el espíritu de la montaña le revela la ubicación exacta del oro que él estaba buscando. El minero vuelve a recordar sobre el oro por el que había venido y revivió su búsqueda por el oro, prometiendo a Añañuca que volvería pronto.

Añañuca roja.

Añañuca esperó día tras día, noche tras noche, pero su minero nunca más regresó. Las gentes del pueblo dijeron que había sido tragado por el espejismo del desierto, y la tristeza abrumó el corazón de la bella Añañuca.

Inconsolable, consumida por el dolor, murió de pena. Los aldeanos lloraron por ella y el cielo se cubrió de nubes y lloró también.

Al día siguiente, el día amaneció brillante y hermoso calentando el  valle y el lugar donde la joven había muerto, llenándose de hermosas flores rojas, cubriendo todo el lugar. 

Es así como nace la leyenda que dice que: Añañuca se transformó en una hermosa flor como muestra del amor que tenía por su minero, y así por siempre permanecería cerca de él.

Es común ver hoy en día, a la Añañuca que florece entre Copiapó y el Valle de Quilimarí.


 Todos actualmente conocemos esta transformación del desierto y la pampa después de una lluvia, como el fenómeno del Desierto Florido.


Recopilación de: Alejandro Glade R.


sábado, 28 de mayo de 2016

Leyenda de la iglesia del diablo


Playa chica de Cartagena, al fondo se puede ver la iglesia sin techo.

Esta iglesia tiene su historia, todo el que la ve cree que siempre ha estado en ruinas, se llama la Iglesia del Niño Jesús, está a un costado de la playa chica de Cartagena, camino a San Antonio.

Con el transcurrir del tiempo ha tenido diferentes aspectos y estados debido a que se cree que en esa iglesia habitan extrañas fuerzas que la llevan a quemarse y a derrumbarse parcialmente. Cada vez que se ha intentado techarla  y ponerla en servicio es parcialmente destruida por lo general en su techo.

La historia que se transforma en leyenda dice así:   Existió en Cartagena un personaje llamado Eugenio Berguessio al que le gustaban todo tipo de juegos de azar, el vicio lo llevó a quedar en la ruina sin un solo centavo, para solucionar el problema de pobreza recurrió a hacer un pacto con el diablo, éste le concede la petición haciéndolo nuevamente rico y con una gran fortuna, pero con una condición, que le construyera una iglesia cristiana, con una particularidad, la iglesia no tenía que tener techo, y la hiso construir justo en el lugar donde está ahora.  

Estado actual. después del terremoto de 1985

El balneario de Cartagena tiene su iglesia con un detalle intrigante, la iglesia casi nunca ha tenido techo, y cada vez que se intentó colocarle techo, esta cayó derrumbado por terremotos o quemado por incendios.

Otra historia que existe sobre la misma iglesia es que dos hermanas hicieron un pacto con el diablo para salir de la pobreza, pero cuando llegó el momento de entregar el alma al diablo el pánico las llevó a eludir el compromiso y fueron a pedirle a un sacerdote que les ayudara a salvar sus almas, este cura les sugirió usar todo el dinero mal habido en la construcción de una iglesia que coincidiría con la iglesia del Niño Jesús frente a la playa chica. Esto puso furioso al diablo que igual quiso cobrar su paga, pero las mujeres se refugiaron adentro del templo, y el diablo con su furia arrancó los techos y condenó a la iglesia a nunca más tener techo y convirtió a las dos hermanas en lechuzas, las que son vistas por los curiosos que pasan por el sector. 

El techo cada vez que se intentó volver a colocar se incendió y se destruyó.

Y es por eso que la Iglesia del Niño Jesús  de Cartagena también es conocida como  "La Iglesia del Diablo" o "La Iglesia Maldita de Cartagena".

No se ha sabido hasta el día de hoy que quieran volver a levantarla. Lo único que va quedando es la fachada, los muros laterales y el muro trasero con una gran cruz adosada al mismo.



Recopilación de: Alejandro Glade R.


La Cueva del Chivato y acontecimientos.



En los terrenos donde está el edificio del diario “El Mercurio”, en Valparaíso, el año 1899, existía una cueva excavada en la roca. Se aseguraba que la cueva era obra de mineros, durante el tiempo de la colonia, también se decía que era obra de la naturaleza por la erosión del mar, pero también se decía que era obra del demonio, por todos los acontecimientos ocurridos en sus cercanías.

La cueva quedaba frente a peligrosas rompientes donde el mar azotaba con una fuerza descomunal. Se decía que en aquella cueva vivía el diablo y se transformaba en un chivo que perseguía a las sirenas que se sentaba en las rocas a peinarse.



La Cueva del Chivo o del Chivato, se le empezó a llamar así desde el siglo XVII, además que la gente lo asociaba con reuniones de brujos que ocurrían en el lugar, se decía que existían poderes sobrenaturales en ese lugar.

 Con los años y sin que pasara mucho tiempo el lugar con sus historias tomó dimensiones inmensas y eran muy pocas las personas que se atrevían a pasar de día cerca de la cueva, pero de noche era tal el miedo que no pasaba nadie.

La gente de Valparaíso aseguraba que, de noche, se aparecía el diablo transformado en un enorme chivo con una terrible mirada, este hipnotizaba y dejaba petrificadas a sus víctimas impidiéndoles cualquier intento de fuga.

Los que lograba escapar, escapaban para caer en las rompientes de ese mar embravecido y abandonando todas sus pertenencias.

El camino que pasaba por la Cueva del Chivato posteriormente se le llamó la Calle del Cabo, que terminaba en la actual Plaza Anibal Pinto.

Durante el siglo XVII y XVIII unas pocas casas había en el lugar y era el paso de jinetes, carretas y carruajes que circulaban sólo de día,  porque por las noches ocurrían infortunados encuentros con el diablo. Era tanto el miedo creado por esta leyenda que en el año 1814 se puso un farol para que el lugar estuviera alumbrado y no ocurrieran desgracias.

A fines del siglo XVIII un comerciante vasco adquiere todos los terrenos y casas de ese sector
incluida la Cueva del Chivato, casi de inmediato dinamitó el lugar donde estaba la Cueva para construir edificios que le sirvieran de bodegas.

 Este vasco hiso fortunas para luego entrar en desgracias que lo fueron consumiendo, logró ser dueño de un buque con el que seguía manteniendo un régimen colonial, innumerables problemas políticos, monopólicos y hasta de guerra comenzaron a preocuparlo. En 1821 sus pertenencias cayeron en poder de los patriotas y el buque fue destruido por un gran temporal en los roqueríos que quedaron bajo la famosa Cueva el año 1839.

 Más tarde el Cerro Concepción fue comprado en 1833 por Josué Waddington, incluidos los terrenos de la Cueva del Chivato y otros en la Calle del Cabo, hoy Calle Esmeralda,  el comerciante inglés ordenó nuevas demoliciones e hiso desaparecer definitivamente la legendaria Cueva.

Se dice que los maleficios alcanzaron también las riquezas de Waddington.

Se dice también que en 1830, un grupo de marineros ingleses ingresaron a la Cueva del Chivato, para expulsar de ella aun grupo de vagos y delincuentes que pernoctaban y tenía su centro de operaciones, ellos eran, los autores de todos los delitos atribuidos al “maléfico” Chivo.

El 19 de Julio de 1978, el intendente y alcalde de la ciudad, procedieron a descubrir una placa recordatoria en el lugar donde alguna vez existió la famosa Cueva del Chivato.


Recopilación de: Alejandro Glade R.





Leyenda de Petronila Neira


 Lugar: Concepción.

En los primeros días del mes de noviembre de 1910 apareció flotando en las aguas de la Laguna Redonda de Concepción el cuerpo de una mujer degollada, esta mujer era Petronila Neira, identificada por su hermana.

Vivía en un conventillo de la ciudad de Concepción, arrendando una pieza en la cual sólo tenía un colchón y una máquina de coser. Se había separado de su conviviente  por disgustos y maltratos cuando vivía en Coronel. Petronila tenía alrededor de veinte años cuando fue encontrada en la Laguna Redonda.

Petronila se vuelve a reunir con su conviviente después de un tiempo cuando la encuentra en Concepción, esta decisión fue fatal para ella, porque no pasó mucho tiempo cuando su conviviente junto a un amigo le dieron muerte degollándola y tirándola a la laguna en un saco lleno de piedras.

Se dice que el primer milagro fue el haber salido a flote para que la encontraran y así poder capturar a los culpables Retamal y Carrillo los cuales confesaron su crimen.

El martirio que sufrió Petronila le significó su  beatificación.

Se ganó la "beatificación" por su martirio. Para el pueblo era una "Santa" por haber sido degollada, romperle la dentadura, ensacarla y colocarle piedras pesadas para que se fuera al fondo de la laguna. Su primer milagro fue salir a la superficie, y así se ganó la beatificación por lo sufrida.

La gente construyó casitas en la orilla de la Laguna y comenzó a ser visitado el lugar, con el tiempo se levantó un "santuario"  el que hoy es destinado a pagar mandas, favores y peticiones.

Mucha gente y devotos de ella, a la Laguna le llaman laguna Petronila Neira. En ciertas noches Petronila se aparece en el mismo lugar donde fue asesinada.

Cuando la laguna se secó sus devotos siguieron su peregrinación al cementerio de Concepción donde hasta el día de hoy es la tumba más visitada durante todos los días del año.


Su popularidad como milagrosa se ha conocido no solamente en Chile, ha trascendido también a los países vecinos de donde también vienen a ponerle flores y velas. Esta devoción fue creciendo por la inmensa cantidad de milagros concedidos.

Recopilación por: Alejandro Glade R.



miércoles, 11 de mayo de 2016

La pata del Diablo.



Fotografía de Sergio Campodónico 1930
La leyenda dice que un extraño hombre, llegó hace muchísimos años a la región del Cajón del Maipo. Totalmente vestido de negro, alto y apuesto con una mirada intimidante hacia los hombres e intrigante hacia las mujeres.  Famoso por enamorar a las bellas muchachas que siempre lo miraban. No se resistía ninguna mujer joven, un día lo encontraron seduciendo a la hija del alcalde. El problema fue que esa jovencita estaba destinada, para ingresar al convento de monjas.

Pasó el tiempo y el hombre negro seguía enamorando mujeres, se dedicaba solamente a la conquista de hermosas mujeres, con mucho éxito, por desgracia de los hombres de la zona.

Una noche de fuerte temporal, en el que el Cajón del Maipo parecía desmoronarse sobre sus cerros, por el sector de El Toyo, un hombre mojado y abandonado a su suerte golpeó las puertas del convento de monjas que por ese entonces había en el lugar.  Pidió por favor que le dieran refugio y alojamiento hasta que pasara la tormenta, era imposible seguir con esas condiciones climáticas.

Debido al verdadero diluvio la madre superiora accede a darle alojamiento al hombre, el forastero pasó el umbral de la puerta y se dispuso a pasar la noche en un cuarto contiguo a una despensa. A la madre superiora le llamó la atención las vestimentas del forastero, como también que el forastero no se dejara ver la cara, ocultándose detrás de la bufanda. Pese a la desconfianza  y a la inquietud de la madre superiora, el hombre fue conducido a la habitación en que pasaría la noche.

Cuando las religiosas habían conciliado un sueño profundo, el hombre de negro se levantó y, se dirigió hacia la habitación de una de las novicias, atravesando la pared,  la novicia era nada menos que la hija del alcalde. La iniciada se despertó asustada, y vio entre las tinieblas la figura de negro de un hombre que despedía olor a azufre, a la iniciada  se le escapó un grito, el que fue aplacado por la mano del hombre tapándole la boca con una mano, y huyó con ella en brazos, rodeado de una nube espesa en la que se escuchaban infernales gritos de almas en dolor.


La  madre superiora al escuchar el grito de su iniciada, salió al patio y vio al hombre de botas huyendo con la novicia que estaba siendo raptada. Rápida y  guiada por su fe, tomó un frasco de agua bendita y salió tras el demonio que poseía a la niña, le dio alcance y, gritando atrás Satanás, e invocando a Dios con la señal de la cruz, le lanzó el agua bendita. El diablo, liberó rápidamente a la víctima, y se transformó de inmediato en una enorme sombra alada con pies gigantes, el que huyó saltando el sector que separa el río de los cerros. Al hacerlo, con tal fuerza y rabia, dejó impreso en una roca del cerro, una enorme huella de uno de sus pies. Hoy en ese lugar hay un puente colgante en el lugar llamado  “El Toyo”, y hay una parada de autobús que recorre San Alfonso hasta Santiago, lugar donde perfectamente podemos ver la huella.

Recopilación de: Alejandro Glade R.



martes, 3 de mayo de 2016

El Piguchén

 Lugar: Chiloé

Apariencia: Este ser presentaría una apariencia cambiante; la cual generalmente tiene el aspecto de una culebra voladora. Pero además podría presentarse como, serpiente, ave, pez, cuadrúpedo, rana, murciélago y hasta humanoide; o igualmente una mezcla de ellas. Se dice que además, su cuerpo estaría cubierto de pasto, arbustos y cilindros retorcidos, a modo de ganchos tipo cuernos y otras estructuras que sobresalen del cuerpo de esta criatura. También es conocido como el Peuchén, Pihuchén, Pihuychén, Pihuichén, Piwuchén o Piguchén es una criatura perteneciente a la mitología mapuche, y posteriormente introducida en la mitología chilota.

El Piguchén
Leyenda.

Según los mapuches esta criatura generalmente tendría la forma de una serpiente alada, la cual habitaría en los bosques. Sus alas con las que vuela a voluntad le crecen cuando llega a su edad madura. Presentaría una longevidad increíble y al llegar a la vejez, se transformaría en un pájaro del tamaño de un gallo o un pavo joven; pero igual de sanguinario como su otra forma. Además se caracteriza por tener una fuerza poderosa que puede derribar grandes árboles; y en Chiloé incluso se dice que esta criatura puede levantar gigantescas olas que hacen naufragar las embarcaciones que estén cerca de él.

 Esta criatura se alimenta  de sangre, y comúnmente estaría adherida al tronco de los árboles en las noches y en los días de calor excesivo. Las personas pueden saber dónde ha estado, porque deja huellas de sangre mediante un excremento rojo que chorrea de los árboles en donde vive y se oculta durante el día. También se puede saber de su presencia al escuchar los agudos silbidos que emite estridentemente.

Se cree que esta criatura acostumbraría a vivir cerca de los lagos y ríos, donde su presencia ocasiona gran pánico; ya que produce una sustancia tan irritante que al ser transmitida por el aire o por el agua, ocasiona  erupciones en la piel muy similares a la sarna. Además aquellos que tienen el infortunio de contemplarlo, podrían ser paralizados con su intensa mirada, para que luego esta criatura les pueda succionar la sangre; con lo cual pueden llegar a morir. Igualmente, se cree que cuando los habitantes de una casa se van volviendo extremadamente flacos, y ya se ha descartado la presencia del Colo Colo o el Basilisco chilote; su enfermedad sería producto de esta criatura.

 Se dice que esta criatura, aunque puede atacar al ser humano, lo que es muy excepcional; comúnmente se alimenta de la sangre que succiona de las ovejas, cabras u otros animales; pero no hace daño alguno en los rebaños de cabras u otros animales de color blanco. Se dice que cuando enflaquece el ganado sin una causa aparente, es producto de esta criatura.


Recopilación escrita por: Alejandro Glade R.







lunes, 2 de mayo de 2016

La leyenda del pirata chilote Pedro Ñancúpel.

Lugar: Chiloé

Chiloé

Chilote nacido en Terao, hoy en la costa este de Chonchi, trabajó a la edad de veinte años en el negocio de las pieles junto a sus hermanos y era cazador de lobos marinos y gatos de mar, para después trabajar en la explotación del Ciprés de las Guaytecas, donde fuera hachero.  De la noche a la mañana se cuenta que se dedicó a la piratería uniéndose a la banda de "los Nahuelhuén". Los que hicieron desaparecer naves chilenas y extranjeras junto con el asesinato de sus tripulaciones.


El modo de operar de la banda consistía en perforar el casco de las embarcaciones y abordarlas mientras se hundían.

 Este pirata en alguna oportunidad hundió "barcos de franquía", esto significaba que eran atacados barcos extranjeros  que  tenían paso franco por estos mares, cuando el canal de Panamá aún no existía. Pero lo más que atacaba era a las chalupas cuyos patrones pagaban muy mal el trabajo de los chilotes, les robaban o sencillamente los engañaban. Un par de cementerios por muertes masivas en la zona del Baker (la Isla de los Muertos) dan testimonio de la crueldad de esos tiempos.

Cuando es capturado este pirata en Melinka ya era una leyenda,  porque había evadido la persecución muchas veces y había desaparecido, después de muchos asesinatos en las islas Guaytecas, durante la segunda mitad del siglo XIX.

De allí que su apresamiento en la ciudad de Castro, durante dos años, abre el apetito y la megalomanía de la prensa chilota y lo elevan a dimensiones de leyenda.

El pueblo busca el milagro. Así se urde la esperanza: "Se esperaba un indulto, porque un hombre que había matado a 99 era un valiente. Se dice que el indulto llegó tarde, dicen los cuentos, que llegó cinco minutos después que lo habían fusilado".

El episodio de la cárcel en Castro es uno de los más informados y está lleno de antecedentes respecto a cómo se van construyendo las mentalidades del pueblo chilote a fines del siglo XIX.

Paisaje de islas Guaytecas.

Un cronista de "El Archipiélago", periódico de Castro, ya cuestiona la pena de muerte, el 11 de noviembre de 1888: "i sobre cuya legitimidad o el derecho que la sociedad tenga de imponerla."

Su fusilamiento debió ser postergado hasta que una parturienta que vivía en las inmediaciones de la cárcel, diera a luz.

Pabla Ñancalahuén, su mujer, retira el cuerpo del fusilado con una carretilla desde el sitio de la ejecución.

"Se sepultó sin entierro el cadáver de Pedro María Ñancúpel, casado con Pabla Ñancalahuén, fallecido ayer a la edad de 51 años.., se confesó y recibió los Santos Auxilios."

Tal vez Ñancúpel fue sólo un pirata, un cuatrero de los mares chilotes. Pero su actitud de rebeldía contra "los poderosos" lo muestran a los ojos de los humildes y explotados de su época como un hombre distinto a los de su estirpe y sus acciones delictuales se justificaban moralmente y totalmente, porque lo hacía como un “Robin Hood”, el que repartía parte de su botín entre los más pobres y a raíz de ello decían que lo cometido por él no podía ser delito.

Esa lucidez la obtiene Ñancúpel en la cárcel, cuando tiene conciencia de su muerte, él decía que su destino que iba a ser trágico, se debía a que había nacido un día martes. Hubo coros el día de su muerte y todo el pueblo supo cuál sería su final. Y al igual que la tragedia de Esquilo, será ese coro el que anunciará la muerte de Ñancúpel para transformarlo en héroe, en mito y en leyenda histórica".




Recopilación escrita por: Alejandro Glade R.